lunes, 21 de enero de 2019

Se dice de mí...


“No me digas lo que hablaban mal de mí,
dime por qué se sentían cómodos contándotelo a ti.”
(del web) 

En varias ocasiones puede suceder que alguien venga a ti, a él, a mí, a cualquiera en realidad, para hablar mal de otra persona; y cuando esto sucede la única pregunta que cruza por mi cabeza es “¿por qué?”. Es decir, reflexiono el porqué alguien debiera hablarme mal a mí de algún otro; cuál puede ser el motivo que se esconde detrás de todo.

Podrás pensar que soy una que le da muchas vueltas a las cosas (y no estarías del todo equivocado... jajajajaja...), o que le busco la quinta pata al gato; pero a veces –la gran mayoría– es como el dicho: “piensa mal y acertarás”. Es por eso que me cuestiono sobre los motivos que pueda tener alguien para venir a contarme a mí algo de otra persona. Porque las cuestiones son dos: una, si esa otra persona es desconocida para mí, poco me puede importar que se diga de ella y entonces para qué hacerlo. Y dos, si conozco a la persona en cuestión, ¿qué se busca cuando se me habla mal de ella?, ¿hacer un ‘frente común’ en su contra?, ¿que sea yo quien le diga una verdad que no es mía a esa otra persona? Las posibilidades son muchas, y ninguna encuentro ni bonita ni válida.

En lo personal, estoy segura que quien haya hecho esto conmigo, no se ha sentido cómodo. Porque si es un desconocido digo muy claramente: “no me interesa saber nada” y ni siquiera me detengo a escuchar. Y si es sobre alguien que conozco, pues sinceramente, hubo un tiempo que hacía de embajadora de la ONU, e intentaba que todos vayan de acuerdo, trataba de conciliar carácteres y modos de ver... ahora ya no. Ahora simplemente expreso de forma rotunda que cada uno debe hablar con la persona en cuestión, no colocando a nadie en medio. Al fin y al cabo, ¿dónde está escrito que todos tenemos que ser amigos de todos? Yo tengo amigos, que a su vez tienen amigos obviamente, que no soporto, con los cuales no tengo ningún tipo de relación ni deseo tenerla; pero, por respeto a esa amistad mía, jamás pensaría de hablar mal de esa persona, de alguien que a su vez es su amigo, o por el cual siente afecto. Podría aclarar mi posición; pero más, sería una falta de respeto en mi opinión, y que si ocurriera, sería poner punto final a la amistad.

¿Qué piensas? ¿Has vivido una situación así? ¿Cómo has reaccionado?
Alma & Luna

20 comentarios:

  1. Buena semana amigas..vamos con ello ,si algo he aprendido a lo largo de la vida es que hay frases que se dan por hechas cuando no comulgo con ella , por ejemplo los amigos de mis amigos son mis amigos ..por qué ? noo, mis amigos son míos los suyos pueden ser pero de momento no lo son. Y al respecto de hablar mal de otro cuando te vienen con el chisme , si lo conozco cuando ha terminado de contarme su alegato , lo único que me queda por decirla o decirle es ...Porque no lo consultas con él/ ella ..a mi no me interesa por lo tanto no me calientes la cabeza pq no voy a entrar en vuestros pleitos , al final quien sale mal parado es uno mismo.
    Si al susodicho/a no lo conozco para el tema al instante no me interesa en lo más minino .
    A esto hay que añadir que a todos nos gusta un cotilleo , pero una cosa es eso y otra muy distinta el que te vengan hablar mal de alguien , sea conocido o no.
    El levantar falsos motivos o aunque sean verdaderos sobre alguien ya es peligroso y de mal hacer , eso te dice como es esa persona .
    Muchas gracias chicas por estos temas que te hacen pensar en ti mismo y como solucionar serios aprietos . Un millón de abrazos y os deseo un feliz día y semana y todo lo mejor muakisss.

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    1. Estoy de acuerdo contigo Campi.
      De hecho tuve una época que ahora recuerdo con bastante vergüenza (pero creo que en ese momento era lo único que podía hacer por el nivel de conciencia que tenía entonces) en que me plegaba a ese tipo de historias, a escuchar,o a sumarme a las críticas hacia alguien.
      Luego de mucho análisis, (porque en algún punto me sentía incómoda,mal,etc...) me di cuenta de que era una necesidad mia a "ser aceptada". El hecho de vivir en otro país,sin referencias emocionales y afectivas, creía que la mejor forma de unirme a la gente era plegarme a sus costumbres.
      Ahora,todo eso ha cambiado,trato,como dice el texto de evitar ese tipo de " secretos-chismes-críticas" de gente a la que no conozco,y si la conozco,como tú dices, ofrezco la posibilidad de que lo hablen entre ellos,pero,que yo no soy un megáfono que transmite nada.
      Un besazo!

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  2. Muy buena entrada y muy actual, como el pan de cada día, es cierto que parece algo necesario y de muy mala calaña, hablar mal de otra persona, es sembrar cizaña en un momento que crea heridas en el alma. Yo también he querido ser embajadora de la ONU y he visto que me daban hasta en el carnet de identidad... hoy pienso que cada persona que hiere a otra, no merece darla ni un segundo de mi tiempo.
    Has escrito la realidad al desnudo, hay demasiadas Celestinas pululando como piojos y sembrando discordias... y lo mejor es usar un antiparasitarios y alejarse de ellas.

    Desde el corazón, un abrazo

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    1. Gracias Ángeles, creo que el tema del "lleva y trae" de la crítica etc...es un fenómeno cultural a escala mundial te diría.
      Creo también que ser conscientes de ello, nos ayudará a estar alerta y a no caer en esas trampas.
      Un abrazo!

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  3. Hay personas que necesitan alimentar su vida, devorando la de los demás. Esto es así de triste y real. Supongo que carecen de creatividad o argumentos propios, y al final no pueden más que basar sus días en descalificaciones hacia los demás y, además, expandiéndolo a otros. Precisamente mi último post tiene algo que ver con esto que expones.

    A mí, personalmente, solo me causan pena, porque dejan en evidencia sus carencias, y una amargura que los hace tremendamente infelices, aun cuando su ego, no les permite reconocerlo.

    Yo cada vez tengo más claro, que no merecen ni mi tiempo.

    Un abrazo grande, y muy feliz semana, mis queridas amigas 💙💙

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    1. Totalmente de acuerdo GIne, además tu manera de proceder te libera,te quita peso,le das realmente importancia a lo que la tiene,sin tener que caer en la masificación del chisme.
      Un besazo y gracias!

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  4. Personas mal intencionadas hay muchas, que esconden intereses tras el rótulo de la amistad o peor incluso, del amor. Creo que todos hemos vivido aquello, que alguien nos venga con un comentario de otra persona, por envidia o lo que sea. Solo retratan así su pobreza de espíritu.

    Besos dulces y dulce semana para ambas.

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    1. Muy bueno Dulce, sintetizas perfectamente las conclusiones del post.
      Habla de ellos,habla de la pobreza de espíritu, de la falta de objetivos,o sencillamente de vacío absoluto.
      Un beso y gracias!

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  5. Solo hay que suspirar y continuar caminando que ya de por sí la vida desilusiona. Saludos amiga Lunaroja y amiga Alma Baires, su inspiración es luz y amor real, bonito blog

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    1. Tienes toda la razón Jorge, a veces es todo un ejercicio de tolerancia y paciencia, pero,creo que es lo más sano para uno mismo!
      Un beso y gracias!

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  6. Esto de hablar mal de prójimo lo domina el ser humano, es el pan de cada día, y así siempre ha sido, parece mentira a estas alturas, donde el ser humano debería ser mejor, es al contrario, vamos camino de ser más monstruos.
    Feliz día amigas.
    Un beso

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    1. Tienes toda la razón Carmen,pero,creo que es una especie de epidemia a nivel mundial, que se propaga sin remedio. Es uno con su propia consciencia y su estado de atención el que tiene que darse cuenta de cuando puede caer en lo mismo.
      Muchas gracias! Un beso.

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  7. La frase que encabeza el texto es muy significativa. Será por veces que han venido a hablarme mal de alguien o que yo, en mi propio estado, no tengo nada bueno que hablar de alguien, pero sí entiendo que que nada hay que proyectar sobre los demás los pareceres de uno, ni por bueno ni por malos porque cada cual acaba teniendo opinión.
    Creo que nadie nos libramos de maldecir ni de bien decir, de forma directa o indirecta, y todo pasa. Otra cosa es esa persona que sin venir a cuento, como si fuera en plan salvador, viene sin conocerme a contarme algo de alguien que sí conozco. No interesa. Lo ue digan los demás, a fin de cuentas, es lo que dicen y si conmigo esa persona ha sido mejor o peor es cosa solo mía. Y lo digo de buen fe porque si hay algo que he aprendido con el tiempo es que lo que no se malinterpreta es lo que no se dice ni se insinúa, que luego va y resulta, que mucho bien hace mal y el mal, siempre engendra mal.
    Bueno, que me he enrollado de mala manera para no decir mucho.
    Muchísimos besos y abrazos enormes.
    Sed felices.

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    1. NO te has enrollado nada,al contrario,es muy interesante lo que expresas.
      Personalmente, mi experiencia más absurda,que acabó con una amistad de diez años, fue porque esa persona (una amiga de un grupo de amigas) me planteó de manera bastante violenta cosas que no le gustaban de mi, por wasap,y no habladas personalmente. NO accedí a sus reclamos agresivos diciéndole que no iba a permitir que me hablara de esa manera. Ella entonces, en el grupo general de amigas, esparció todo lo que había dicho de mi, y se fue del grupo. Eso me obligó a mi,a tener que explicar que yo en todo momento quise hablarlo de manera privada,personal,o telefónicamente,para no meter a esas chicas,que nada tenían que ver con su paranoia o sensación personal.
      En resumidas cuentas: ella se fue, todas opinaron que el error había sido de ella por no ser ni clara,ni honesta,ni coherente con la amistad y el amor que nos unía de hacía diez años. Y ahora, estamos todas,menos ella.
      Creo que esto ejemplifica el daño que puede hacer (y hacerse ella misma) una persona que arremete,contra otra, sin intentar resolverlo de forma particular con el/la interesada/o.
      Yo también me enrollé....
      Besitos!

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  8. La maledicencia es como un veneno y siempre hay razones para derramarla en el oído de alguien. A veces nos damos cuenta enseguida de las razones, otras veces el veneno penetra sutilmente y tarda en hacer su efecto. Lo más saludable es proveerse de un buen antídoto y cada uno debe saber cual es, como y cuando inyectarselo. Y lo más importante es que no te tiemble el pulso ante el maledicente. :))



    Me alegro de veros Alma&Luna . Montón de besos y recuerdos. Siempre sugerentes vuestras propuestas.

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    1. Ah qué bueno Sueño Son! Muy buena tu conclusión... buscarnos nuestros propios antídotos y usarlo en caso de necesidad!
      La única pega,es que si el maledicente es alguien a quién quieres... puff... complicado que no te tiemble el pulso.
      Un beso!

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  9. Hay quien tiene una vida tan pobre que la tiene que rellenar con la de los demás. Buscan la complicidad... no les gusta disfrutar en soledad de sus toxicidades.
    Una lástima de personas y tiempo mal invertido.

    Mil besitos mis queridas amigas ♥♥

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    1. Tienes toda la razón. Buscan cómplices, (esto me encantó) necesitan expandir el rumor,porque si no,no tendría sentido.
      Gracias preciosa!

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  10. El que tiene un mundo propio no necesita inmiscuirse en vidas ajenas. Que cada cual viva su vida y sus problemas...
    Me ha encantado este post.

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    1. Hola! Pues sí, así debería ser,pero,no lo es (en general hablo) . Estoy totalmente de acuerdo contigo, aunque a veces se caiga en ello.
      Un abrazo!

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